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Ahora que llega el verano, deberemos de tener cuidado con los “golpes de calor” en nuestros animales. Es bueno para los propietarios identificar los síntomas y saber cómo reaccionar para poder ayudarlos ya que en algunos casos puede resultar mortal.

El golpe de calor consiste en un aumento de temperatura (hipertermia no provocada por enfermedad) en nuestros animales, suele aparecer casi siempre en verano, cuando la temperatura exterior es alta, cuando no hay sitio sombreado donde resguardarse, cuando no hay acceso de agua limpia y fresca durante las horas de calor. Es muy típica las situaciones cuando se deja a un animal en una zona exterior sin sombra o dentro de un coche.

Vamos a saber que nuestro animal tiene hipertermia si su temperatura corporal supera los 41ºC. La única forma de conocer la temperatura de nuestro animal es introduciendo un termómetro rectal, nada de tocar hocicos, orejas u otros remedios caseros.

Y también debemos tener un especial cuidado con animales obesos, razas de hocico chato o enfermos del corazón ya que estas patologías agravan enormemente los golpes de calor.

Es muy importante reconocer los síntomas del golpe de calor como es respiración acelerada, jadeos muy constantes y fuertes, temperatura elevada, el corazón va a un ritmo muy rápido, el color de las encías y lengua suelen ser rojizas y en algunas ocasiones tornarse azules, mucha salivación, el animal puede estar desorientado, tambalearse e incluso perder el conocimiento y en los casos mas graves puede entrar en shock y finalmente provocar la muerte.

Una vez que sospechemos de un golpe de calor en nuestro animal, lo primero que tendremos que hacer es retirarlo del sol y trasladarlo a una zona fresca, ventilada y con sombra. Nunca debemos taparlo ni bañarlo. Empezaremos aplicando paños de agua fresca (no muy fría o helada) por el vientre, cabeza, cuello, patas y pecho. También podremos humedecer la boca con un poco de agua de manera regular.

Tan pronto como podamos, hay que trasladarlo al veterinario ya que es una urgencia veterinaria y actuar de manera rápida y efectiva puede salvarle la vida.

Foto de Pierre Bamin en Unsplash

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